¿Has visto un cobro en tu tarjeta que no recuerdas? ¿Alguien cercano usó tu tarjeta y luego tuviste problemas? Puede tratarse de un «fraude amigo»: cuando tú o alguien de confianza hace una compra y luego se desconoce el cargo. No te preocupes, con prevención y buena administración de tus finanzas, lo puedes evitar.
- Revisa tus estados de cuenta con atención. Algunos cargos pueden aparecer con nombres de empresas que no te suenan. Tómate el tiempo para identificar cada uno antes de preocuparte.
- Habla con tu familia si usan tu tarjeta. Si compartes tu tarjeta o permites que alguien más la use, acuerden bien cuándo y cómo hacerlo. Así evitan confusiones y malos ratos.
- Activa las alertas de tu banco. Recibe notificaciones por cada compra o movimiento. Esto te ayuda a estar al tanto y reaccionar rápido si algo no va como esperabas.
- Guarda los comprobantes de tus compras. Tener los recibos a mano te permite verificar y aclarar cualquier duda cuando revisas tus estados.
- Llama al comercio si tienes dudas sobre un cargo. Antes de reportar al banco, contacta al comercio. Muchas veces es sólo un nombre diferente o un cargo legítimo que no recordabas.
- Educa a tu entorno sobre el uso responsable. Conversar con tus hijos, pareja o personas cercanas sobre el uso de tarjetas ayuda a evitar errores y fomenta hábitos financieros sanos.
- Mantén tus datos actualizados en el banco. Tener tu número de teléfono y correo al día permite que el banco se comunique contigo si detecta movimientos inusuales.
- Reporta de inmediato cualquier cargo que no identifiques. Si luego de revisar y consultar sigues sin reconocer un cobro, avisa cuanto antes al banco para que puedan ayudarte.